miércoles, 16 de febrero de 2011

La vida sigue...

"El triunfo no está en vencer siempre, sino en no rendirse.

La constancia es la virtud donde el resto de virtudes dan su fruto".

domingo, 6 de febrero de 2011

Día Internacional contra la mutilación genital femenina


Hoy, día conta la ablación de clítoris, quisiera recordar algunas cuestiones dadas las dudas sobre el tema que he podido deducir en mi post anterior sobre la ablación.

El clítoris es el órgano donde concentran los nervios que producen placer sexual en la mujer , sin él la mujer no siente ningún placer sexual. La ablación de clítoris consiste en su mutilación antes de que las jóvenes lleguen a la menarquía para tratar de impedir que conozcan el placer sexual, así pueda llegar virgen al matrimonio, puesto que si no es de ese modo, la mujer puede ser rechazada. También se realiza para evitar el deseo de la mujer y así cortar toda posibilidad de que busque su placer fuera del matrimonio solamente tenga hijos con el marido.

La circuncisión masculina y la mutilación genital femenina (algunas veces incorrectamente llamada "circuncisión femenina") son dos procedimientos completamente diferentes. La circuncisión de los hombres, cuando se realiza por motivos diferentes al religioso, es considerada por la mayoría de la gente como una medida profiláctica (de salud). En cambio, la ablación de clítoris, por su naturaleza , usualmente resulta en la mutilación del órgano sexual femenino, lo cual hace muy difícil que la mujer involucrada pueda sentir placer sexual alguno.

En fin, para que no haya dudas, el equivalente a la ablación en los hombres sería la completa amputación del pene.


Esta mujer, Agnes Pareyio, tenía 14 años cuando su madre la obligó a someterse a la mutilación genital femenina.

Le quitaron el clítoris, los labios menores y mayores. El tipo I o clitoridectomía es la eliminación del prepucio del clítoris. Lo que en el mundo islámico se conoce como sunna y que en África equiparan a la circuncisión masculina, aunque no tiene absolutamente nada que ver: mientras la femenina es mutilación y tortura, la masculina tiene efectos beneficiosos para la salud, como reducir el riesgo de contagio del VIH. El tipo III o infibulación la practican sobre todo en Sudán, Somalia o Eritrea. Es la excisión del clítoris, labios y sutura de ambos lados de la vulva. Sólo dejan un pequeño orificio que permite la salida de la orina y la sangre menstrual. A veces también te suturan las paredes de la vulva. Lo peor, según Agnes, es que lo hagan sin anestesia.